El país de la infraestructura“deplorable”busca financiamientoy buenos proyectos

Para recuperar la infraestructura nacional, Brasil tendrá que hacer más que el doble del volumen de inversiones en el sector, pasando de los actuales 2,1% del PIB (cerca de R$ 130 billones) para el 5,0% del PIB (cerca de R$ 300 billones)al año

La situación de la infraestructuraen Brasil es “deplorable”y el País está destinado a sufrir duras consecuencias por la falta de inversiones en el sector, como la pérdida de la competitividad en el mercado globalizado y retrasos en su proceso de desarrollo. La evaluación es del director para la Infraestructuradel Banco Mundial, Paulo Procee, al comentar un estudio realizado por la institución, contemplando un escenario hasta 2020. Los motivos son numerosos, pero el Banco lista, entre los principales, la falta deplanificación, la ausencia de financiamiento de instituciones privadas locales y, principalmente, proyectos mal elaborados.

Para Procee, la corrupción es más un obstáculo para el desarrollo de la infraestructuraen Brasil.Él cree que el mercado cerrado propicia la cultura de la corrupción, através de la formación de carteles. Para se tener una idea del efecto desastroso de los carteles sobre el sector, basta recordar que nada menos que 32 empresas, con fuerte actuación en el sector de la infraestructura, están hoy día involucradas en acciones en la Justicia Federal, resultantes de la Operación Lava Jato. Ellas representan el 14% del PIB, ya sea, moverían cerca de R$ 760 billones.

A eso si suma la burocracia, que para la máquina administrativa con centenas de reglas que dificultan la participación de nuevos layers como las constructoras de medio porte y empresas internacionales de ingeniería.

La crisis económica en Brasil ha reducido, además,la capacidad de financiamientode nuevos proyectos y paralizó emprendimientos en curso. De acuerdo con la Asociación Brasileña de la Infraestructura e Industrias de Base (Abdib),en 2015 las inversiones en la infraestructuraatingieron el 2,1% del Producto Interno Bruto (PIB), considerando recursos públicos y privados en los cuatro grandes sectores – energía eléctrica, transportes, telecomunicaciones y saneamiento. Para 2016, la evaluación de la entidad junto a inversionistas y agentes públicos y privados indica que habrá una nueva reducción en el volumen total de inversiones, que deberá registrar el peor nivel de aportes en la infraestructura desde 2009.

Aun de acuerdo con Abdib, entre 2014 y 2015, las inversiones tuvieron una caída del 17%, en números constantes, en todos los sectores de la infraestructura. En los últimos dos años, la reducción de los aportes públicos fue mucho mayor que los aportes privados.

En 2015 aumentó la participación privada en el total de inversiones en todos los sectores: un 55% en transportes, un 68% en energía, un 16% en petróleo y gas, un 100% en telecomunicaciones y un 11% en saneamiento.

Proyectos incluidos en el PPI

Transporte

• Aeropuerto de Porto Alegre

• Aeropuerto de Salvador

• Aeropuerto de Florianópolis

• Aeropuerto de Fortaleza

• Terminales de Combustibles de Santarém (STM 04 y 05)

• Terminal de Trigo de Rio de Janeiro

• BR-364/365/GO/MG

• BR-101/116/290/386/RS

• EF-151 SP/MG/GO/TO

• EF-170 MT/PA